Descanso vs. Internet
14 enero, 2019 | Vivencias | No hay comentarios
Ya conté que por un problema de salud tuve que hacer reposo Nada importante, un tema muscular molesto, que me llevó a descansar más de la cuenta.
En esa situación se intensificó mi uso de internet, ya que además habían empezado mis vacaciones. Hablé con amigas; saqué fotos; tejí; descansé; visité varios médicos; descansé; y el resto del tiempo navegué por internet.

En ese camino comencé buscando libros para leer. En Instagram encontré varios blogs dedicados a la lectura, y me anoté en el bookclub online de Viajar en Palabras. Me compré tres libros (los comenté acá).
Pero ello no alcanzó, o mejor dicho, seguí recuperándome y navegando por internet. Compré libros de arte. En 2018 visité el Folk Art Museum de Nueva York con la intención de comprarme el libro de quilting que documenta quilts hechos por hombres usando como tela los paños de lana de los uniformes de los soldados del siglo XVIII. El libro se llama “War Time Quilts” de Annette Gero. El libro estaba agotado. Ahora aproveché y le mandé un correo electrónico y Gero me dio el dato que en el museo de quilts de Nebraska los tenían. Y si ! Lo conseguí !
Mirando facebook -varias veces al día- y logrando aumentar la cantidad de tiempo en pantalla, a modo de competencia con cualquiera que se me quiera cruzar, descubrí a Harriet Power, una esclava que en el siglo XIX realizó un quilt a mano de los pasajes de la biblia referidos a la creación. Cuando tuvo necesidad, lo vendió por cinco dólares, y gracias a que la compradora supo apreciar su trabajo, el quilt hoy existe y se exhibe en el Museo Americano de Washington DC, en Estados Unidos. Tamaña historia fue documentada y no pude resistir y me compré uno de los libros que la registraron.
También encontré un libro de bordado de arte contemporáneo de la genia de Charlotte Vannier que se llama “De Fil En Aiguille”. Y en el interín, sonó el portero eléctrico. Era el cartero que me traía correspondencia. Mientra bajaba a atenderlo pensé que seguro era un aviso para que vaya (alguien más, no yo que estoy en reposo) a retirar a la sede del correo un paquete con un libro que había encargado a Bookdepository y que por algún misterio argentino nunca llegó a casa, se volvió a Europa y luego de pedirlo nuevamente, debía llegar a destino. Pero nooooo, el cartero traía el paquete en sus manos con mi libro de Andra Stanton llamado “Dimensional Cloth”.
No terminó todo allí. Como estaba terminando de tejer al crochet un pie de cama con flores africanas (acá tienen el patrón gratis), tuve que entretenerme con otro para el que necesitara usar los restos de lana que tengo. Así fue que barriendo la web encontré uno de Sandra Paul del blog Cherry Heart, que compré en Ravelry. Excelente compra porque me acompañó unas cuantas tardes.
¡Cuanta felicidad internet! Mi perro Cooper fue mi gran compañía y contigo la pasé genial.
BICHA de CLAUDELINA